¿Problemas para comunicar?

Una correcta comunicación es fundamental, especialmente en los entornos de trabajo. Una oficina debería ser un lugar donde poder hablar con claridad y concentrarse fácilmente. Por ello, ha de contar con unas características acústicas adecuadas para realizar trabajos que requieran concentración, reuniones o tareas en las que colaboran varias personas.

El problema viene cuando en una oficina los trabajadores se deben comunicar entre ellos o con los clientes, ya sea cara a cara o por teléfono. También es muy frecuente que en el espacio de trabajo se encuentren ordenadores, impresoras y otras herramientas que producen ruido. Otro factor que influye en el rendimiento acústico de una estancia son sus dimensiones. Según su tamaño, la claridad e inteligibilidad de las conversaciones puede verse afectada y por tanto, es posible que se produzca el molesto eco, incrementando de esta manera los problemas acústicos.

Todo ello genera un malestar acústico que entorpece la concentración y que en el caso de una oficina, influye negativamente en la productividad de la empresa.

Cada entorno es diferente y requiere un análisis adaptado a cada caso. Sin embargo, los problemas relacionados con la acústica y la calidad sonora de una estancia tienen una solución común. Acondicionar acústicamente la oficina es fundamental para frenar el molesto ruido y la reverberación. De cara a los clientes que acudan a realizar visitas o reuniones a la oficina, una sala acondicionada se traducirá en un confort acústico que garantiza que no se produce ninguna pérdida de información y que las conversaciones se escuchan y entienden.

Para lograrlo, se deben instalar paneles acústicos en el revestimiento de paredes o creación de falsos techos. En ideatec, somos especialistas en aportar soluciones para el acondicionamiento acústico de cualquier estancia. Nuestros productos están fabricados con material fonoabsorbente, como madera o espuma, que reducen el eco en la oficina y evitan que el sonido rebote por las paredes y techos, creando un confort acústico que ayudará a mejorar la calidad sonora de la sala y a la vez ofrecerá un diseño elegante y discreto.

Fases de comunicación de un mensaje

Los problemas relacionados con la acústica afectan directamente al proceso de comunicación que cualquier persona sigue al emitir un mensaje. En él, se distinguen seis etapas fundamentales:

  • Codificación. Comienza cuando la persona que emite un mensaje transforma en su mente las ideas o sentimiento que desea transmitir en palabras. Por ejemplo, un persona quiere solicitar una reunión y organiza mentalmente cómo va a explicar el motivo de la misma.
  • Emisión. Se produce cuando las palabras que se piensan se convierten en sonidos, palabras escritas o signos, dirigidos a la persona receptora.
  • Transmisión. Ocurre en el momento que el mensaje es enviado hacia la persona receptora. Es en esta fase cuando el ruido o una mala calidad sonora de la estancia afecta al mensaje, provocando que el receptor no pueda escucharlo de manera correcta.
  • Recepción. En esta fase la persona a la que va dirigida el mensaje lo recibe e interpreta, utilizando el mismo código que usó el emisor. En esta fase se encontraría el receptor de nuestro ejemplo, el cliente, que recibe el mensaje del emisor.
  • Feedback. Es aquí cuando el receptor proporciona el emisor información sobre la reacción que ha producido el mensaje en él. En nuestro caso, sería la respuesta positiva o negativa a la solicitud de reunión.