En ideatec somos expertos en construir futuro. Por ello, nos preguntamos dónde se encuentra el futuro más inmediato. Y la respuesta fue instantánea: en los colegios. Espacios en los que se concentra una gran cantidad de ruido constante, y donde controlar los distintos factores acústicos se hace fundamental.
Quedan dos minutos para el recreo, se empiezan a escuchar las sillas del aula de al lado. Los niños se alborotan, ya no quieren escuchar más al profesor, quieren salir a jugar con sus compañeros y a comerse el bocadillo que en casa les han preparado. Pero aún no es la hora, empiezan a escucharse los gritos de los profesores.
Ha terminado el recreo, ahora toca la clase de Lengua y Literatura, pero en el aula de abajo es la hora de Música. Desde la calle se escuchan las voces de los que hoy han venido en chándal porque toca Educación Física, juegan al fútbol enérgicos. Y cuando por fin el profesor llama la atención de algunos de sus distraídos alumnos, se escuchan las risas de la clase de al lado que vuelve a distraerles.
Y todavía no hemos hablado del tráfico, las obras y todos aquellos ruidos que se pueden dar de forma externa y que se escapan de nuestro control.
La contaminación acústica, al igual que la contaminación medioambiental es un problema que debemos tratar. Los colegios son una fuente de ruido inevitable y constante, muchos niños sufren problemas para concentrarse a causa de ellos y la falta de concentración está directamente relacionada con el fracaso escolar.
En ideatec queremos mejorar la calidad de la enseñanza evitando el molesto ruido y otros fenómenos como la reverberación, que perjudican el aprendizaje de los niños y a sus profesores.
Aportamos soluciones que eliminan los ecos de los pasillos que tanto jaleo montan cuando los niños entran o salen de clase, creando una uniforme calidad de escucha. En nuestro amplio catálogo de productos podrás elegir entre espumas, fibras y textiles que mejor se adapten a tus necesidades de solución acústica.
Sin necesidad de obra, nuestros paneles acústicos decorativos darán un toque de alegría al lugar donde los niños pasan la mayor parte de su tiempo. Crean espacios y ambientes de trabajo agradables y óptimos para la concentración y el estudio con el objetivo de mejorar la calidad de la enseñanza.
De esta forma, ayudamos a los profesores a que pasen menos tiempo llamando la atención y más formando las mentes del mañana.